Hoy a las 18:38, hora Española, la luna ha entrado en fase nueva en el signo de Escorpio.
Hasta hace unos años no prestaba más interés a la astrología que el conocer mi signo (sol), mi ascendente (luna) y su relación con los otros signos del zodiaco. Pero desde hace un tiempo, a medida que soy más y más sensible a las lunaciones y las energías de la Tierra, he descubierto que estar al tanto de lo que se cuece por ahí arriba, entre los astros, me ha ayudado enormemente a entenderme mejor a mi misma, a fluir un poquito más en vez de ir siempre a la contra de mis necesidades personales, y a ser más paciente con los demás seres humanos, tan influenciados por las energías astrales como yo... les guste o no. ¡Espero que este artículo te sea de ayuda!
HECHOS
Sol en Escorpio.
Luna Nueva en Escorpio, conjunción con Mercurio, trígono con Neptuno en Piscis.
Equinoccio de otoño.
SENTIMIENTOS
Si las semanas anteriores a esta lunación todo ha sido un bullir de sensaciones interiores incomprensibles, malos humores y contradicciones, para poner sobre la mesa todo aquello que es necesario eliminar, atajar, cortar y despedir con honor (si sigues mi página de Facebook tienes, probablemente, en mente ahora mismo ese arcano de la Muerte, que tanto y tan buen trabajo ha estado haciendo por nosotros estas últimas semanas) y que estaba oculto, reprimido o en las sombras; la luna nueva en Escorpio trae la tranquilidad, serenidad y capacidad de acción. ¡Ave María purísima, ya era hora!
SIGNIFICADOS
El sol en Escorpio: Conexión con nuestra parte emocional (¿No me digas? ¡A penas me había dado cuenta! Modo sarcasmo ON), pero, al ser un signo fijo, está relacionado con nuestro poder sentimental y la intensidad de nuestros afectos... y desafectos. El sol en Escorpio nos capacita para poder sanar interiormente para poder brillar y vivir felices. Escorpio nos impele a la introspección, para conectarnos con el origen del dolor o la sombra que nos cuesta integrar en este momento de la vida. Ahí es nada, monada.
Luna nueva en Escorpio: La luna nueva siempre trae comienzos, y de qué tipo serán está supeditado a las influencias del signo en que ocurre. Escorpio está considerado el signo más potente del horóscopo. Nos ayuda a alinearnos con la parte oscura de nuestro comportamiento y pensamientos, nuestros misterios ocultos, lo no dicho. Y es que éste es el signo del chaman, la curandera y la bruja. Algo que se hace evidente en este trabajo de sanación que conlleva esta luna es como los abusos a los que hemos sometido reiteradas veces a nuestro segundo chakra, donde se asientan nuestras emociones, sexualidad y deseo natural le han obligado a cerrarse para defenderse, lo que ha dejado a nuestro tercer chakra, el del poder personal, impotente. Esa pérdida de energía del nuestros chakras inferiores repercute en una pérdida de voz de nuestro quinto chakra, haciéndonos incapaces de hablar sobre nuestra verdad o de ser escuchados, de expresarnos plenamente. Sin los sentimientos encontrados, el desasosiego interior y las limpiezas energéticas que hemos sufrido (a lo grande) en estos días previos a la lunación, este problema habría seguido quedando oculto y no estaríamos dispuestas y preparadas para solucionarlo. Seguiríamos sin voz, sin poder personal, y sin poder acceder a la fuente de nuestros auténticos deseos. ¿Tiene ahora un poco más de sentido el calvario por el que nos hemos sentido pasar? Yo diría que sí.
Los dos planetas regentes de Escorpio son Plutón y Marte. Plutón expone a la vista lo que está muerto y en descomposición dentro de nosotros y en nuestra sociedad, con la intención de arrojarlo al caldero de la transformación de las diosas oscuras, la Cailleach, la Morrigu, Cerridwen, Macha, y así utilizar esa energía para una nueva vida. Marte simboliza nuestros deseos naturales y nuestra capacidad de ir tras ellos. En Escorpio, Marte nos proporciona toda la energía que necesitamos para hacer nuestra voluntad realidad, la pura esencia viva de la Reina de la Noche, permitiéndonos hacer frente a nuestras sombras y locura, bailar con ellas, en vez de enfrentarlas, reprimirlas o medicarlas, y obtener de ellas todo el poder y fuerza que necesitamos.
Conjunción con Mercurio: Así que esta luna "loca", potente, trasformadora y emponderadora, se conjuga con las fuerzas de Mercurio, el planeta de las comunicaciones (propias, a nivel interno, y exteriores, con los demás) para desatascar ese quinto chakra paralizado por haber reprimido nuestros sueños y anhelos tanto tiempo. ¡Ahora dime que la astrología no es la pera limonera!
Trígono con Neptuno en Piscis: Por si todo esto no fuera suficiente para darnos la visión clara necesaria para vernos por dentro, la energía para hacer limpieza, la fuerza para expresarnos y capacidad para autosanarnos, la luna de la Reina de la Noche se alía, además con Neptuno, el planeta de la intuición que transita por Piscis... ¡el signo de la intuición! ¿Casualidad?
Equinoccio de Otoño: Este es el velo entre mundos por antonomasia. En el equinoccio, una fase de la Madre Tierra termina, para comenzar otra, a través del descanso. Todos los seres vivos, menos quizá algunos bípedos muy estresados y desconectados de sus necesidades auténticas, van a dormir ahora para resurgir renacidos en la primavera. El Velo entre Mundos, también, se hace más fino, para permitir a nuestros seres queridos fallecidos darnos los mensajes y consejos recolectados durante esta fase que termina, y a nosotros la capacidad de recibirlos y, a través de su contacto sagrado, renacer a nuestra vez a una nueva vida refrescados a través de los meses oscuros del año. Los espíritus de nuestros antepasados están con nosotros. A medida que invocamos su sabiduría, sin resistirnos a su sagrada presencia ni invocar el dolor de la pérdida, nos recuerdan cómo despertar a la plenitud de esta vida terrena que tenemos, cambiando nuestra vieja piel por una nueva.
Hermoso.
EL TRABAJO
Por una vez, tienes en tu interior todas las herramientas para sacarle partido a esta situación astrológica y dejarla seca como una naranja exprimida. Sin leer complicados libros, hacer hechizos incomprensibles o intentar comprender el funcionamiento del Universo. Sin doblegar tu Alma y tu carácter, sin sufrir más. ¡Estás sintonizada con Radio Divina Universal! El trabajo con esta luna nueva es la meditación.
Siéntate cómodamente, tomar respiraciones pausadas y relájate todo lo posible. Tómate tu tiempo. Cuando estés relajada, céntrate lentamente en cada una de las partes de tu cuerpo, empezando por los pies, subiendo por las pantorrillas, rodillas, caderas, vientre, cintura, estómago, pecho, abre el pecho, manos, antebrazos, codos, brazos, hombros, relaja los hombros, cuello, orejas, nuca, boca, no aprietes la boca, frente, cuero cabelludo... Ahora, cuéntate a ti misma cómo se sienten cada una de esas partes. Concéntrate en ellas, con calma. Sientes presión, frío, calor, dolor, picor, temblor. Qué ideas se agolpan en tu mente. Observa las ideas sin desarrollarlas, deja que se extingan mientras te concentras en respirar pausadamente. Ahora, relajada, hazte estas preguntas:
- ¿Qué me mantiene atada al pasado y no me deja avanzar, evolucionar y crecer?
- ¿Qué deseo realmente y estoy dispuesta a comprometerme conmigo misma para conseguirlo?
- ¿Qué sueños me producen sensación de esperanza e ilusión y he estado reprimiendo por imposibles, incómodos o inapropiados?
- ¿Qué injusticias que he sufrido dan vueltas en mi cabeza una y otra vez? ¿Soy capaz de perdonarlas y, sencillamente, seguir avanzando en mi vida? ¿Estoy preparada para vivir sin el dolor que me aporta rememorarlas una y otra vez?
Mantente tumbada, cuando termines de hacerte las preguntas, sin preocuparte por si tienes o no las respuestas. Sólo relajada y feliz del trabajo bien hecho. Las respuestas llegarán, en sueños, mientras estés haciendo la colada los próximos días o de repente al ducharte. Ten cerca de ti un cuaderno y apúntalas inmediatamente, sin juzgarte, da igual lo locas o extravagantes que parezcan. Al fin y al cabo, las mujeres estamos locas y nuestra locura es Sagrada, ¿no era así?
Mucho Amor.
Maeve
Fuentes: Astrofilico
Mistic Mama
Astrobutterfly